Existen varios aspectos importantes que debes considerar en esta etapa como el tiempo que tardes en aprender, llevar a la práctica la teoría, tener la mente abierta a nuevas ideas y formas de realizar las cosas. Estas son algunas razones por las que todos debemos tener muy claro lo que queremos alcanzar y cómo debemos lograrlo.

¿Qué entendemos por Línea de Carrera?

Se trata de un plan marcado, pasos a seguir, objetivos fijos para alcanzar esa meta, a donde se quiere llegar centrados en intereses y competencias personales y laborales. Esta estrategia brinda un sendero a seguir con el fin de cumplir las metas profesionales.

El primer paso es realizar un análisis personal, cómo es uno como persona, que se espera de su carrera profesional, cuánto tiempo se le dedica al trabajo y los sacrificios que se tienen que llevar a cabo con el fin de mejorar nuestra carrera (tiempo libre, inversión en mayor formación académica, objetivos de la vida personal).

Aquí detallamos algunos puntos:

Paso a paso: En el trabajo se valora la proactividad como competencia laboral pero es importante respetar los tiempos de aprendizaje en cada nivel de la organización que ocupemos y poder tener la paciencia de esperar para pasar al próximo nivel. Esto nos dará solidez desde la base y nos hará mejores profesionales.

Planificar la línea de carrera: En nuestra carrera profesional es importante tener un plan armado, con objetivos claros de las etapas que debemos cumplir para llegar al próximo objetivo en función de las competencias que tenemos y de las que queremos adquirir. Dentro del pensamiento a largo plazo, ir marcándose desafíos a corto y mediano plazo, que nos hagan sentir motivados con nuestro trabajo y demuestren de manera tangible nuestro desarrollo profesional.

La teoría con la práctica: Es importante tener la flexibilidad de aceptar decisiones organizacionales aunque no sean las que nuestra teórica nos dice. Es importante aprender y cultivar la capacidad de adaptarnos a nuevas formas de hacer las cosas, a nuevos puntos de vista, y luego poder ver en la práctica los resultados de dichas acciones. Aprender a manejar la incertidumbre y tener capacidad de adaptación son dos competencias especialmente valoradas por las empresas, por lo cual nos conviene cultivarlas, siempre que no sintamos que algo va en contra de nuestros valores personales, claro está.

En suma, tengamos presente la importancia de diseñar nuestro propio Plan de Desarrollo de carrera profesional y revisarlo con frecuencia, ya sea para darnos cuenta que estamos en momento de ir un paso más hacia adelante o para redefinir algún objetivo que fuimos cambiando sobre la marcha.