1. Nuestros sistema inmunitario emplea el tiempo de sueño para regenerarse, lo que te permite luchar con eficacia contra las toxinas y los gérmenes. Descansa tus horas y evita el cansancio innecesario. 
2. La deshidratación es una de las principales causas de fatiga. Tomar agua ayuda a permanecer más activo a lo largo del día. Una mala hidratación afecta las habilidades cognitivas como la atención, memoria, rapidez de respuesta y toma de decisión. ¡No descuides tu vitalidad para el estudio!
3. Generar un buen espacio de trabajo es otro de los puntos clave para que esta nueva rutina puertas adentro resulte productiva y agradable a la vez. ¡Todo en orden y mucha luz! 
4. Organiza tus actividades tanto de estudio como recreativas. Existen muchas opciones para mantenerte ocupado después de tus deberes diarios. ¡Busca alternativas para no caer en el agobio de la rutina! 
5. Mantener hábitos de higiene estrictos en lo personal como en el hogar prevendrá las enfermedades. Considerando que se estará en un ambiente concentrado. ¡Una rutina de limpieza diaria es lo ideal! 

¡Seamos positivos y cuidémonos todos!