Mantener buenas relaciones con tus compañeros dentro del área laboral es una forma de hacer que el ambiente sea más agradable para todos los miembros. Sin embargo, puede suceder que, sin querer, adoptes actitudes que incomoden al resto. Para evitar situaciones desagradables, ten en cuenta lo siguiente:
1. Diálogo amable: transmite a tus compañeros una imagen cálida a través del discurso y sus formas: saluda, agradece y sé respetuoso. ¡Nadie quiere tratar con alguien malhumorado u ofensivo!
2. No invadas su espacio: si compartes escritorio con otro compañero, no limites su espacio o movimientos. Tampoco invadas su mesa de trabajo con tus objetos personales. ¡Si vas a agarrar algo, pide permiso!
3. No transmitas tus problemas personales: es bueno recordar que “lo que pasa en casa se queda en casa”. Al llevar tus problemas personales al trabajo no solo te distraerás, sino que incomodarás al personal. Mejor resérvalos para otra ocasión. ¡Hacerlo en el horario de almuerzo, fuera de las oficinas, está mejor!
Siguiendo estos consejos, triunfarás en cualquier relación laboral.