Muchas veces las personas evitan equivocarse puesto que hay un rechazo generalizado a la idea de cometer errores o fracasar. Sin embargo, todos debemos equivocarnos alguna vez y esto nos permite obtener grandes enseñanzas.

Por ello te mostramos cómo equivocarse puede ayudar a mejorar tu productividad.

• Te permite cambiar de rutina. Si día a día realizas las mismas actividades sin obtener un resultado beneficioso, es la hora de un cambio. Si en una semana llegaste siempre tarde, cambiar de horario o de ruta para llegar a tu oficina y así llegar más temprano.
• Te enseña a arriesgarte. El mierdo de salirnos de nuestra zona de confort nos impide arriesgarnos por algo mejor. Quizás no salga bien a la primera, pero con esfuerzo y perseverancia obtendrás lo que quieres.
• Aprendes a hacer las cosas de manera distintas. No todos los problemas se solucionan siguiendo siempre los mismos pasos. Equivocarte te permite buscar nuevas soluciones que anteriormente no hubieses pensando.
• Conoces tus límites. Muchas veces tomamos más trabajo o responsabilidades de las que podemos y terminamos fracasando. Debemos aprender a decir no y enfocarnos bien en un número limitado de proyectos para llegar a excelentes resultados. El que mucho abarca, poco aprieta.

Recuerda, a nadie le gusta equivocarse pero aprendes a ser más humilde y a explorar otros caminos que pueden llevarte a mejores resultados. Siempre hay que seguir adelante.