Sin embargo, dormir bien no implica dormir de más y despertar temprano no significa un reposo pobre. Por ello, te proponemos modificar tus hábitos para dormir a una hora adecuada y aprovechar los beneficios de despertarse temprano que tú como alumno debes empezar a considerar:

1. Cuerpo: despertar temprano te llenará de emociones positivas y te permitirá explotar esa energía matutina. Con el ánimo a tope, tu salud te lo agradecerá. ¡Estírate y comienza con el pie derecho! 
2. Desayuno: si eres de esas personas que “no tiene tiempo” para preparar el alimento más importante del día, deja de escudarte y levántate con anticipación: ¡no pospongas la alarma! Planificarás mejor y no tendrás retrasos ni complicaciones. 
3. Estudio: en vez de madrugar leyendo tus separatas para esa práctica que tanto te agobia, aprovecha las primeras horas del día para repasar tus lecturas. El estudio por las mañanas suele ser más realista y consciente. 

¡Verás cómo todo cambia si le sonríes al sol! ¡En el hábito está el éxito! 

Revista de Neuro-Psiquiatría (Universidad Peruana Cayetano Heredia)