Es un sistema de educación centrado en el respeto a los derechos de los niños y en su capacidad espontánea para aprender. Este modelo se emplea aún hoy en muchas escuelas del mundo y, sin duda, es una herramienta bastante útil para que los padres eduquen a sus hijos.

Pone énfasis en la necesidad de favorecer el desarrollo natural de las aptitudes de los alumnos a través de la autodirección, la exploración, el descubrimiento, la práctica, la colaboración, el juego, la concentración profunda, la imaginación o la comunicación. 

A continuación te dejamos unos tips para trabajarlo con los niños en casa:

1. Deja que exploren su entorno con libertad: así aprenden de lo que los rodea.
2. Haz que se sienta seguro de sí mismos: esto incrementa su autoestima y mejora sus habilidades sociales y comunicativas.
3. Acepta sus opiniones e ideas con frecuencia: harás que se sienta bien y mejoren su autoestima y seguridad.
4. Genera un ambiente agradable: no solo en cuestión de cosas materiales, sino también en la convivencia con las demás personas del entorno.
5. Respeto: escúchalo cuando te habla y responde a sus inquietudes. No lo ridiculices ni lo juzgues. 

Y tú, ¿qué opinas de este método?

También te puede interesar: 
Mejora tu aprendizaje: ¿En qué consiste el método PQRST?