A día de hoy, las grandes empresas han dejado de darle tanta relevancia al número de diplomas con los que cuenta el candidato y, más bien, se han enfocado en el desarrollo de habilidades transversales llamadas también soft skills o habilidades blandas.
Las habilidades blandas tiene que ver con la puesta en práctica integrada de aptitudes, rasgos de personalidad, conocimientos y valores adquiridos. Por eso resultan ser tan importantes tanto para el ámbito laboral como académico.
Entre las más buscadas figuran las habilidades comunicativas y de relacionamiento, la creatividad, la capacidad de trabajar en equipo, la responsabilidad, la honestidad, la empatía y las actitudes proactivas a la hora de resolver problemas y generar ideas innovadoras que ayuden a impulsar el crecimiento de la organización:
¿Cuáles de estas habilidades ya pusiste en práctica? ¿Cuáles te faltan?