Cuando nos encontramos en una entrevista laboral, es normal estar algo nervioso pero lo que muchos no saben es que decimos mucho sin decir una sola palabra. Nuestro lenguaje corporal delata nuestro nerviosismo o puede mandar un mensaje completamente equivocado. 

Aquí te contamos cuáles son los 7 errores más comunes y que debes evitar si no quieres causar una pésima primera impresión.

1. Mirar siempre hacia abajo. Si nunca miras al entrevistador al rostro, lo que demuestras es una falta de confianza en ti mismo. Una buena postura es la espalda erguida, mentón y rostro en alto.
2. Encorvarse. Esta posición demuestra que una persona no quiere abrirse a los demás.
3. Apretón de manos débil. Aunque no todos se estechen las manos, un apretón débil puede dar la impresión de incompetencia y pocas habilidades. Una buena forma de saludar es dar un apretón con la misma fuerza que la de tu interlocutor.
4. Echarse para atrás. Si te recuestas hacia atrás, das la impresión que no estás interesado en la conversación.
5. Mirar directamente a los ojos. Este seguro causará extrañeza puesto que siempre se ha dicho que uno debe ver a los ojos de otra persona. Pero no es tan cierto, mirar fijamente a otra persona puede ser considerado de mala educación e intimidante. Mira uno segundos a su rostro, luego a sus ojos, luego a su nariz y luego baja la mirada. No necesitas enfocarte por completo a tu entrevistador.
6. Permanecer siempre serio. Aunque sea una entrevista laboral, no sonreír puede percibirse como falta de felicidad.
7. Mover tus pies o manos de forma nerviosa. La forma más común para denotar los nervios es mover las extrimidades rápidamente o sin control. Respira y júntalas, solo mueve las manos cuando quieras hacer énfasis en algo.

Recuerda practicar antes de dar una entrevista, respirar y confiar en tus habilidades para que tu lenguaje corporal no te traicione.