Normalmente, podemos encontrarnos con clases complicadas en las que nos es difícil avanzar en el dictado. Bien sea porque la clase tiene una naturaleza particular, por falta de recursos o porque encontramos cierta resistencia y mala receptividad hacia nuestra asignatura. ¿Qué podemos hacer en esas situaciones?
Cabe resaltar que el uso de estos métodos no es excluyente. Como maestro puedes usar las formas que consideres necesarias. ¡Los alumnos se adaptarán y tú les seguirás el ritmo desde afuera!