1. Organízate: suele suceder que perdemos tiempo meditando lo que debemos hacer. ¡Tómate 5 segundos y actúa! Además, identifica las horas en las que tienes más energía hasta que te acostumbres al horario virtual y puedas distribuir mejor tus tareas. 
2. Adecúa el entorno: ambiente un espacio que esté siempre listo para que puedas estudiar y realizar tus deberes. No hay que perder de vista lo que dice profesor; prepara el sitio libre de distractores. 
3. Elimina sentimientos negativos: los sentimientos negativos pueden alimentar la pereza; más aún en clases virtuales cuando la falta de motivación y la ansiedad atacan. Busca actividades que te estimulen y te ayuden a continuar con tus deberes.  

¡Mejora tu rendimiento y acaba con la pereza!